Una chispa de alegría

Holaaaaaaaaaaaaaaa,
bueno, una vez más por aquí, en las penas y penurias de Juana, esta vez le voy a dar una chispa de alegría que sino las amigas cibernéticas se me preocupan, aunque bueno, creo que la explicación que ya os di es buena... NECESITO SOPESAR LA BALANZA, necesito escapar de la cara de payaso simpático para ponerme un poco a la tremenda, lo necesito para poder darme cuenta de las cosas y personas tan maravillosas que me rodean, entre ellas todas vosotras que siempre intentáis animarme y siempre lo conseguís. Besos muy grandes, pero que muy muy grandes...
Pero siempre fui así, hasta incluso mi antiguo trabajo lo requería. 8 temporadas como animadora turística y lo entenderíais al completo... Todo el día riendo y tras las sombras la tristeza, la echaba de menos y no encontraba ni espacio ni tiempo para tomarme un café con Doña Tristeza, amiga inseparable del ser humano... Por eso hoy en día me permito el LUJO de caer y levantarme... para volverme a caer y volverme a levantar...

Bueno bueno bueno... ¿Os cuento un sueño? Siiiiiiiiiiiii

El otro día hablé con el banco... Hola Guti, me quiero hacer autónoma... bla bla bla... Hace tiempo que estoy en ferias y ahora en un mercado precioso cerca del pueblo... ahí vendo mis jabones,  Hasta ahora era un secretillo pero ya estoy cansada de seguirlo... Este invierno voy a empezar a ir de legal, autónomos, sanidad, hacienda, consellerías... Maestro artesano (bueno para esto necesito que pasen 5 años más, tiempo suficiente para aprender lo que aún me falta)... Sigo mi sueño, mi SUEÑO, mi meta, mi vida... Empecé medio en broma y ahora voy muy en serio.
Quizás mis jabones no son los más bonitos del mundo, ni los mejores, ni tampoco llevan colores sintéticos ni dibujitos... pero son mis pequeños hijos y ahí están, y se venden muy bien y si a alguien le molesta que los venda pues me sabe muy mal, pero me he de buscar la vida, necesito el dinero para vivir y poderme dedicar a esto y ÉSTA es mi forma de Vida...

Me encanta llegar al mercado con los Senegaleses, argentinos, mallorquines... olor de verdura y fruta fresca... me enchufo mi MP3 y empiezo a montar al son de Melendi... El mercadillo pasa de la oscuridad de la noche al jaleo del día y a las 2 de la tarde vuelve a estar vacío... donde hubo miles de personas ya no queda más que los restos de papeles y bolsas de los mercaderes... Un momento muy especial. Un entorno maravilloso y ante todo, mucha ilusión puesta en las 4 patas de mi mesa de mi puesto de 2 metros que poco a poco iré ampliando con la ayuda de mi hermana, de la inyección económica del banco y de mis ganas de trabajar, de mis ganas de seguir luchando y de mis ganas de seguir dedicándome a lo que hasta ahora más me gusta.
Besos y Volando Voy... Volando vengo... son las 4.53 de la madrugada y me voy al Mercadillo... Voy a pasármelo bien!!!

Cortate un pelo

Hoy me he cortado el pelo... bueno, más bien me he pasado la moto a lo militar... sí señoras y señores, me quería retocar las puntitas que me salían rebeldes y me he equivocado al equilibrar la máquina, y como auténtica profesional en la materia parecía la Demie More española ante el espejo. Sí, me veía super guapa con mi pelito corto pero arreglado y voy y empiezo a arreglármelo por el nacimiento de la frente... SOCORRRRRROOO. En fin, que voy rapada rapadita como una militar en Afganistán.
En parte me da completamente igual, ya lo he hecho un par de veces, pero hoy ha sido sin querer... aunque a decir verdad, hoy me hacía falta.
Volvemos a las penas y penurias de Juana, a la exigencia inapropiada del errado, al tira y afloja de la cuerda invisible. Yo creo que esto ya es hormonal, porque ya me fastidia el sentimiento parasitario que tengo en mi interior. El otro yo negativo, el que te pone a prueba todo el tiempo, el que sale cuando más confiada estás de ti misma... y es tan triste y penoso que hasta lo cuento en internet, ahí donde la gente cuenta sus cosas espléndidas y maravillosas yo me hago un hueco y cuento las desidias y agonías del día a día de un parado...
El tiempo me absorbe y a la vez me aburro como una ostra. Necesito trabajar y no busco trabajo. Los mercados me van bien pero tengo miedo a hacer más... Y encima quiero escribir y en realidad la sola idea de escribir algo negativo me aburre considerablemente.
Con lo cual... disculpen las molestias pero me voy a hacer algo que me divierta más que escribir Las Penas y Penurias de Juana.
Un beso a todos

Juana

P.D.(y que conste que no pongo foto, porque al agobio no hay que darle más de los 3 minutos que he utilizado para escribir esto...)