sábado, 16 de enero de 2010

Conversaciones con una misma, o eso creo yo


Bueno, ya acabaron las navidades, los reyes magos, cumpleaños y demás cositas varias que por el calendario electoral casero tenemos. Se acabaron las lucecitas caseras que nunca enciendes, las visitas a los grandes almacenes. Comprar, comprar y comprar y se acabó el gastar pasta inútilmente en cosas que en febrero acaban en un rincón de la habitación, el altillo del armario o los bajos de la cama.
Cenas de familia, comida de familia, desayuno de familia, regalos de familia, broncas de familia y adiós al tabaco... Sí, sí, sí, dejé de fumar...
Sí, ya llevo 15 días y me siento libre, feliz y limpia.
También me he pasado a la comida vegetariana desde un punto de vista hipócrita, osea mucha verdura, mucho cereal, más fruta pero un poco de carne todavía entra, además del seitán y el tofu y pescado... poco a poco que vienen curvas y esto no es fácil...
Me siento más ágil, más ligera, más sana y por supuesto más gordita... estoy hinchada con tanta semilla y tanto cereal y tan poco tabaco, pero estoy más feliz que nunca...
Podría bucear un poco más en cada tema, buscarle la vuelta, hablar por hablar, explicar por explicar, pero uff no tengo ganas, no tengo ganas de darle vueltas y más vueltas y más vueltas a los temas... Lo siento, otra vez será.
Lo del ser vegetariano es una cosa que sí voy a ahondar tarde o temprano, me gustó investigar por sus blogs, por el foro (al cual sigo acudiendo), con su filosofía. Sus vídeos (uff que duritos)... no sé, simplemente me gusta, me gusta. No sé si llegaré algún día a ser vegana o si dejaré la carne para siempre y definitivamente, no tengo ni idea, aunque por mucho que me quiera engañar estoy un poco en el camino... pero en fin, ya os iré contando... Ya os mandaré la dirección del blog de recetas Vegetarianas, jejejje
Es que es un poco radical todo esto de no comer carne ni pescado, por ejemplo a mi me encanta el pescado, y supuestamente se deja de comer animales para su protección, para su no explotación, para su no vejación, su no asesinato en pro de nuestra alimentación... antiespecistas, vegetarianos, veganos, crudoveganos... uff un largo sinfín de palabras, sentimientos y personas que viven en pro y para sus principios, sabiendo lo que hay por detrás. No es fácil no, para nada, y encima se tienen que aguantar los comentarios raros, incluso de las personas que te dicen que te apoyan, que adelante, hasta de esos al final, al sentirse fuera de lugar te ponen los puntos y te dan caña con el tema...
"¿Tampoco puedes comer salchichón o jamón serrano? ¿Y si un animal te ataca qué haces, lo acaricias? ¿y si te encuentras en una isla desierta y no tienes para comer? ¿ Y si lo cazas para comer? Cuidado con la anemia, cuidado con lo que te dejas... Y tonterías por el estilo..." Pues imaginad que soy esposa y nuera de cazador y pescador y que en casa se comía la carne en cantidades industriales y lo más triste, es que nunca me había parado a pensar en qué proceso pasaba esa carne para llegar finalmente a mi mesa... vamos que sabía que era un cerdo, pollo o gallina, pero ni me había parado a pensar que un día, no muy lejano, habían vivido, pastado, respirado y sentido.
De verdad que es muy interesante el tema y el documental Earthling a mi me impresionó muchísimo y eso que no vi más de 16 minutos de la hora y media que dura... pero en fin, que estoy al principio del camino de todo esto. Ahora esto sí que es cierto, siento un aprecio completamente distinto hacia los animales... cuando antes era un tanto reacia ahora soy más tierna, cuando antes tenía a mis gatos que ni caso les hacía ahora intento acariciarlos cada vez que puedo... No sé, no sé... lo dicho, estoy al principio del camino, y el camino es largo...

2 comentarios:

Vegana catalana dijo...

Hola Juana,

Adelante con el vegetarianismo! (qué te voy a decir yo que soy vegana? jeje).

Mi familia también es omnívora (por no decir carnívora) y aún así creo que un vegetariano en una familia omnívora puede velar porque no se descontrole el asunto :D.

Ánimo, es un mundo lleno de satisfacción personal. Pero como siempre búscala en tu interior, y no fuera... ;)

Un abrazo!

Juana dijo...

Hola Vegana Catalana,
gracias por leerme, gracias por venir, vaya una sorpresa!!!
Cada día se me hace más fácil la transición. Disfruto más comiendo, me sigo hinchando como un globito, pero ya estoy anotando mis recetas vegetarianas para poder realizarlas de nuevo.
En casa se lleva mejor, mi marido ha aceptado y participa en mi nueva forma de vida. Dice que tiene la gran suerte de poder alimentarse bien allí donde vaya, en su trabajo come de todo y en casa come las verduras y frutas (hasta infusiones toma ya) que le faltan en su dieta. Mi hija feliz... Yo con el conjunto feliz... A veces le veo husmear en mis archivos y revistas y me encanta que se interese por el tema de la alimentación y poco a poco por el derecho de los animales.
Gracias por estar a mi lado.
Muchos besos
Juana